Vino Etna DOC: cómo trabajamos
Cómo trabajamos en las viñas
Wine, Human, Nature, Etna
Al crear nuestro vino Etna DOC, entre las filas, toma forma la impronta ética y natural de nuestra producción (Wine, Human, Nature, Etna), a través del uso de prácticas biológicas con un enfoque de tipo sostenible y regenerativo. Por lo tanto, no usamos química, sino solo productos permitidos en BIO.
Nos enfocamos en limitar la proliferación de oídio y peronospora, monitoreando las condiciones climáticas para maximizar la eficiencia de azufre y cobre, eligiendo en el viñedo un empleo a concentraciones mínimas. En presencia de ataques de polillas en algunas áreas más sensibles, prevemos el uso de la confusión sexual como técnica biológica. Practicamos el pasto controlado, la ventilación del suelo con la extracción manual de las vides, el abono verde alterno y el uso de material natural para el atado de las vides. A la necesidad, fertilización orgánica en otoño y/o enmiendas naturales del suelo en primavera. Sembramos, por tanto, plantas leguminosas y gramíneas. Las cortamos en flor para luego enterrarlas, para favorecer el aporte de material biológico como fertilizante natural y el consiguiente enriquecimiento del suelo.
Creemos útil el uso de abono verde para aumentar a nivel de la raíz las bacterias que ayudan a fijar el nitrógeno en el suelo, favoreciendo su fertilización natural.
Las estaciones
En invierno podamos las vides manualmente, muy severamente las vides jóvenes, menos severamente las viejas. Apoyamos, en esta fase, la ramificación, reduciendo el impacto de los cortes invasivos. Protegemos también el sistema linfático de las plantas con la técnica llamada «madera de respeto», para una mayor longevidad de la vid, evitando el secado interno.
La gestión del verde en el período primavera-verano, comienza con la poda manual (spollonatura) directamente en la madera vieja. Se prosigue con la poda verde cerca de los meses de verano, con un control del vigor vegetativo dependiente del año y del vigor presentado.
Al final del verano procedemos entonces con el aclareo del tercer racimo para favorecer la concentración de nutrientes en los racimos seleccionados. Además, al reducir significativamente los rendimientos por hectárea, mejoramos la ventilación y la salud final de las uvas y la consiguiente maduración fenólica completa. La vendimia se lleva a cabo estrictamente a mano para obtener una uva seleccionada y intacta, con la ayuda de cajas abiertas del medio peso de 15 kg.
Cómo trabajamos nuestro Vino Etna DOC en la bodega
No vinificamos con una receta preestablecida o con un modelo estandarizado, sino que interpretamos la cosecha a través de elecciones específicas. Creemos que una producción artesanal de cualidad es posible sólo después se un excelente trabajo de selección en viña. Seleccionamos uvas equilibradas, sanas y maduras, evitando aquellas sometidas al uso de cualquier intervención químico-físico que pueda alterar su naturaleza.
El mismo día de la vendimia, las uvas son despalilladas y luego prensadas con una prensa neumática a baja presión de trabajo. Controlamos las maceraciones, que tienen lugar en tanques de acero termo-reguladas. Llevamos a cabo entonces la decantación, con la ayuda de bombas peristálticas para la gestión suave de los flujos y la ausencia de posibles contaminaciones.
Si es necesario, se realizan «reemplazos ventilados» para estimular el metabolismo de las levaduras con una ligera oxigenación del mosto-vino. La fermentación se realiza de forma natural, sin adición de levaduras y el aporte de dióxido de azufre es mínimo o, a veces, completamente ausente. La fermentación maloláctica ocurre de modo natural antes del embotellado en primavera.
En la bodega sigue una vinificación y crianza en contenedores de acero. Es una excepción el Neromagno Etna Rosso D.O.C. Para su producción, se usan tonneau (barriles) de 2° y 3° paso para un refinamiento de 18 meses. La intención es no «enmascarar» la tipicidad del vino Etna Doc sino hacer que el tanino típico de Nerello Mascalese sea más suave, completo y estructurado. No llevamos a cabo ningún tipo de filtraciones, ni clarificaciones, pero favorecemos el depósito de las lías finas antes del embotellado, con la ayuda de bajas temperaturas para apoyar la decantación. La bodega dispone de un laboratorio interno equipado para los análisis del vino. Gracias a él, seguimos las evoluciones naturales de los vinos blanco y tinto del Etna con observación e interpretación asiduas hasta el embotellado.